Se ha formado un gran escándalo por unas declaraciones del presidente francés, Nicolas Sarkozy, en las que cuestionaba la inteligencia de Rodríguez Zapatero: "Puede que no sea muy inteligente", parece que fue la frase textual de Sarkozy, que ahora han aclarado algunos de sus asesores y secretarios: no es lo que parece, en realidad se refería a sí mismo...Ya. El caso es que hasta la mismísima Segolene Royal (¿la recuerdan?) ha escrito una carta al inquilino de La Moncloa para pedirle disculpas por el tono "injurioso" del comentario atribuido a Sarkozy.

Nos parece que, además de sacar las cosas de quicio con mucha facilidad, esto supone un ejercicio de hipocresía general bastante considerable. Porque en el muy probable caso de que Sarkozy hubiera, en efecto, dudado de la inteligencia de Zapatero, ¿es eso algo que no hayamos hecho todos los españoles al menos alguna vez en nuestra vida?, ¿qué español con dos dedos de frente (y aún con uno) de derechas, de centro e incluso socialista con carné, no se ha preguntado alguna vez si Rodríguez Zapatero es tolili o sólo lo parece? Nadie, ¿verdad? Luego, parece razonable que también Sarkozy se lo pregunte, aunque sólo sea como mera hipótesis.

Porque de Zapatero pueden subrayarse alguna virtud y muchos defectos, pero lo que no parece es que sea una mezcla entre Pitágoras y Aristóteles. Evidentemente, sabe lo que hace, es decir, no gobierna por casualidad ni de carambola, sino que tiene un proyecto claro que consiste en matar el espíritu de la Transición, desenterrar los odios previos a la Guerra Civil, intentar destruir todo rastro de catolicismo, extender el analfabetismo como mejor forma de que los ciudadanos no puedan pensar por sí mismos, e implantar, de facto, una dictadura silenciosa, de corte progre radical-relativista, con toda la apariencia de una exquisita democracia bananera. Un portento.

¿Puede hacerse todo eso siendo un tonto del haba? Probablemente, no. Pero, siendo sinceros, tampoco hace falta ser Schopenhauer. Hablando en plata: es posible que Zapatero sea más listo que inteligente, que tenga una inteligencia "clase media", a cinco minutos de la de Pepiño y a diez de la Maleni, pero lejos, en todo caso, de la que le podría permitir ser un brillante catedrático o un ejecutivo triunfador. Eso es lo que parece desde fuera, y suponemos que eso es lo que ha advertido Sarkozy a juzgar por su rotundo comentario, ahora puesto en entredicho.

De nuevo, lo políticamente correcto, ¿ven? No puede dudarse de la inteligencia de Zapatero, y en caso de que se dude, no puede expresarse la duda. ¿No son éstos, los socialistas, los que siempre hablan de libertades y de derechos democráticos?, ¿no contemplan como tales la libertad de expresión y la de opinión, y el derecho a ejercer esas libertades individuales? Nada. Son muchos ya los que ven en España una dictadura al estilo Chávez o Fidel, y son tantos los síntomas que sería locura no admitir esa hipótesis. Conviene tenerla muy en cuenta.

Lunes, 20 de abril de 2009.