Principal

Diario YA


 

Gana Sánchez.... y ahora qué

Pedro García La situación, después de las primarias del PSOE, no invita al optimismo porque son conocidos los bandazos ideológicos de Sánchez, su falta de proyecto político sólido, sus coqueteos con la izquierda populista y radical, y su indefinición en asuntos tan elementales como qué ha de entender por nación una persona que aspira a gobernar España. Bastan los ejemplos propios o el más reciente de los socialistas franceses para mostrar cómo la persona elegida por la militancia en unas primarias puede ser luego castigada por el electorado en unas elecciones generales.

Con la victoria de Sánchez son demasiados los interrogantes que se abren para el futuro inmediato de un partido socialista que necesita con urgencia regenerarse y suturar las heridas que tiene abiertas. Ya saben qué es lo que sucede cuando se juega con fuego. El problema mayor es que los damnificados pueden no ser solo ellos y las consecuencias sobre la propia legislatura en curso pueden ser nefastas para la estabilidad que España tanto necesita.