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Diario YA


 

Investigan la muerte de un soldado al no abrirse su paracaídas durante un ejercicio

Paula Gordon Gimeno. Un soldado de 24 años perteneciente al batallón de cuartel general de la Brigada Paracaidista (BRIPAC VI) del Ejército de Tierra falleció la pasada madrugada al sufrir un accidente durante un ejercicio de lanzamiento nocturno en el campo de maniobras de San Gregorio (Zaragoza). Según han informado fuentes del Ejército de Tierra, el soldado se llamaba Antonio García Sierra, de Quintanar de la Orden (Toledo) y pertenecía a la Compañía de Reconocimiento Avanzado de la BRIPAC. El soldado estaba realizando unas maniobras tipo Alfa, un lanzamiento de apertura manual nocturno concretamente, cuando se produjo el accidente. Las causas por las que el paracaídas no se abrió, aún se desconocen por lo que están siendo investigadas. Según un portavoz del campo de maniobras de San Gregorio, el paracaídas del soldado no se abrió en el momento del salto produciendo que Antonio García Sierra resultara herido de gravedad.

 El militar fue inmediatamente trasladado al hospital MAZ de la capital aragonesa, donde finalmente falleció. En las últimas semanas han sucedido en las Fuerzas Armadas una serie de incidentes y accidentes que han puesto de relieve el mal estado en el que se encuentra el material con el que tienen que trabajar las Fuerzas Armadas. La semana pasada tuvo lugar en Canarias el accidente del helicóptero militar en el que murieron cuatro militares, cuyos cuerpos todavía no han podido ser rescatados. El único superviviente, Johnander Ojeda Alemán, mecánico sargento, explicó que el accidente se produjo tras el fallo en el sistema de comunicaciones, después de lo cual el aparato se precipitó al mar. Estos aparatos disponen de un sistema de flotadores que se activa al caer al agua y les permite mantenerse a flote, pero no funcionó. Hay que señalar que los recortes en el presupuesto del ejército están haciendo muy difícil, por no decir imposible, la renovación de material, vehículos y aeronaves que llevan ya mucho tiempo en uso.

Además, el avión en el que viajaba la reina doña Sofía, un Airbus 310 de las Fuerzas Aéreas españolas, de vuelta de su viaje oficial a Guatemala sufrió una avería y tuvo que hacer un aterrizaje forzoso en el aeropuerto internacional de las Américas, de la capital dominicana. No es la primera vez que ocurre esto, el pasado 26 de enero, el príncipe Felipe de viaje a Honduras para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente, Juan Orlando Hernández, también tuvo que hacer un aterrizaje de urgencia en Santo Domingo, por una avería en vuelo. Dos días antes, el príncipe tuvo que cancelar un viaje oficial a Brasil por avería en uno de los alerones del Airbus 310. Esa vez ni siquiera pudo despegar de Torrejón, aunque estuvo esperando en el aeropuerto durante 7 horas.

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