Principal

Diario YA


 

"LA VERDAD OS HARÁ LIBRES"


Rafael Nieto,
director de "Sencillamente Radio" en Radio Inter.
Ha nacido el niño Dios, nuestro Salvador, en un portal de Belén, y ante esa noticia, todo, absolutamente todo palidece y se hace pequeño, insignificante, mezquino. Nada es comparable al anuncio de la Buena Nueva, porque cada Nochebuena la Humanidad tiene una oportunidad para redimirse, para convertirse y creer. Este programa, su productor Gerardo Sanjurjo, sus patrocinadores y anunciantes, el Grupo Intereconomía, y en su nombre, este humilde trabajador en la viña del Señor que les habla, les deseamos a todos los oyentes una muy Feliz Navidad en compañia de sus familias.

De todos los mensajes que nos dejó el Redentor en sus tres años de vida pública, hay uno que es imprescindible recordar en un día como el de hoy: "Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos. Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres". No hay posibilidad de paz social, ni de auténtica Justicia, ni de Estado de Derecho, ni de democracia, cuando una sociedad da mayoritariamente la espalda a la verdad. Al revés, lo que se crea es una falsa democracia y una falsa justicia, base de los disparates de dirigentes sin escrúpulos y que conduce a sus ingenuos seguidores a la violencia y al caos, perpetrándose entonces el más atroz de los crímenes, que es el que se comete en nombre de las mayorías.

En su primera Venida, Jesús nos alertó contra los demagogos y falsos profetas, que tratan de embaucar a los demás, alejándonos del camino que Cristo nos dejó trazado, claramente, para hacernos santos y construir un mundo de paz. Esos falsos profetas hoy se presentan a las elecciones con programas que saben que jamás cumplirán, en la certeza de que siempre habrá miles y miles de incautos, de despistados, que entre Dios con mayúsculas y cualquier diosecillo disfrazado de urna, de partido o de líder político, elegirán lo segundo.

Este jueves hemos asistido en Cataluña a la eclosión de un separatismo antiespañol, al que no le importa que sus líderes sean golpistas, traidores, delincuentes o prófugos de la Justicia. Todo se lo perdonan, porque se han convertido en sus pequeños dioses, en los ídolos que probablemente merezcan. Esas masas cretinizadas, como suele llamarlas Juan Manuel de Prada, han digerido con gusto una historia deliberada y groseramente falseada. Y este pasado jueves han indultado con su voto irresponsable a unos golpistas, exigiendo a España que los saque de la cárcel, porque les quieren en el Gobierno. Han votado, por tanto, a Barrabás.

Casi lo de menos es la victoria en votos de Ciudadanos, cuya candidata, Inés Arrimadas, tiene mucho mérito, sin duda. El partido de Albert Rivera se está convirtiendo en la única opción medio seria a medio plazo para el electorado de centro derecha español, algo que desde hace cuatro días es la principal preocupación de Mariano Rajoy y su cohorte de aduladores oficiales y oficiosos. Pero ante el flagrante expolio de España a los catalanes de bien, ante la constatación de la alta traición que ha permitido que unos golpistas puedan presentarse a unas elecciones y ganarlas, el resto de consideraciones, incluidas éstas, nos parecen menores.

Hoy sí podemos decir que el problema de Cataluña, que es el mayor problema de España, no se resuelve con un artículo constitucional. Es probable que el inquilino de La Moncloa ya se haya dado cuenta, porque es un hombre inteligente. En esta cuestión, la Constitución del '78 pinta poco, más allá de que, obviamente, hay que atenerse a las leyes que de ella emanan. Pero la solución a este problema de odio a España acumulado durante décadas, y de la institucionalización de la mentira sólo pasa por una labor de pedagogía y de reeducación que ya no puede esperar más, una tarea que es ardua y poco gratificante a corto plazo, razón por la que estamos convencidos de que no la harán los políticos, traficantes del cortoplacismo. Esa es una labor que tenemos que hacer todos los españoles de bien, cada uno desde su posición, y con la seguridad de que, si Dios nos ayuda, ni siquiera nosotros podremos ver los resultados, que se harán presentes en futuras generaciones.

"Conoceréis la verdad y la verdad os hará libres", nos dijo nuestro Señor. Pero muchas personas prefieren la esclavitud de una partitocracia corrompida e indecente a mirar cara a cara, frente a frente, a la verdad. De su camino de conversión depende, sin duda alguna, el futuro de España y también de la Humanidad.

Rafael Nieto,
director de "Sencillamente Radio" en Radio Inter