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Diario YA


 

El protagonista del día es Francisco Giner de los Ríos, fundador de la Institución Libre de Enseñanza

Los alumnos de la Institución Libre de Enseñanza: adelantados de la LOGSE

Javier Paredes. El protagonista del día es Francisco Giner de los Ríos, filósofo, pedagogo y fundador de la Institución Libre de Enseñanza, que falleció el 17 de febrero de 1915. Giner es también el divulgador en España de las doctrinas krausistas, una versión ideológica que, con apariencias de tolerancia, en realidad propugna una versión radical del liberalismo, en la que queda eliminada toda referencia a Dios. Y en buena medida el hueco dejado por Dios lo ocupa la Naturaleza. De aquí que la Institución Libre de Enseñanza herede del Krausismo para sus métodos pedagógicos el gusto por las clases experimentales y las excursiones.

 Los alumnos de Institución Libre de Enseñanza, adelantados de la LOGSE, recelaban de la cultura libresca y hacían todo tipo de excursiones al campo, a museos, a fábricas… Algunas duraban incluso varios días; y se recuerda una muy célebre porque los alumnos fueron andando desde Madrid a Lisboa, pues no en vano decíamos anteriormente que los krausistas bajo esa capa de tolerancia padecían ramalazos de radicalismo de vez en cuando. ¡Pobres niños cómo se les tuvieron que quedar los pies llenos de ampollas y la cabeza vacía de contenidos de no leer ningún libro por hacer tanta caminata! Por lo demás, ya se comprenderá que este tipo de enseñanza sólo estaba al alcance de la burguesía acomodada de Madrid.

 Y en cuanto a las renovaciones pedagógicas las hubo y muy importantes en el siglo XIX pero, además de la Institución Libre de Enseñanza, también fueron otros los que las aplicaron, como por ejemplo las que llevo a cabo en esta misma época el padre Manjón (1846-1923) en sus Escuelas del Ave María de Granada. También aquí se les ponía a los alumnos en contacto con la Naturaleza y hacían excursiones, aunque sin llevarles a pie hasta Lisboa, pero sobre todo se les educaba integralmente proporcionándoseles una educación intelectual y una formación moral. Y a diferencia de la Institución Libre de Enseñanza que atendía a los hijos de la a burguesía madrileña, las iniciativas del padre Manjón estaban dedicadas a los sectores marginales de la población, y concretamente a la comunidad gitana.
 

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