JM Alesson. Recientemente, el digital www.diarioya.es ha publicado un artículo que traducía a cifras la labor humanitaria que realiza la Iglesia Católica en España. Esta labor ‘callada’ que, no obstante, viene desempeñando la Iglesia desde siempre, se enfrenta al hecho paradójico de que, en medio de la actual crisis financiera y cuando más decisiva resulta, por raro que parezca, menos repercusión alcanza y más desconocida es para la mayoría. Los medios de comunicación, con honrosas excepciones, no la mencionan nunca, empeñándose tercamente en ignorarla. Una gran mayoría de ciudadanos y residentes en España desconocen la maravillosa contribución diaria de la Iglesia al sostenimiento de miles y miles de hogares. Se cuentan por miles las familias que están superando la crisis financiera gracias a esta labor, tan social y humana como desinteresada. Y, sobre todo, ‘callada’...
Estas son las cifras que publica Diario Ya:
· 5.347 Centros de enseñanza. Un millón de alumnos (ahorran al Estado 3 millones de euros por centro/año).
· 107 hospitales (ahorran al Estado 50 millones de euros por hospital/año).
· 1.004 centros, entre ambulatorios, dispensarios, asilos, centros de minusválidos, de transeúntes y de enfermos terminales de SIDA. Un total de 51.312 camas (ahorran al Estado 4 millones de euros por centro/año).
· Gasto anual de Cáritas: 155 millones de euros (salidos del bolsillo de los cristianos españoles).
· Gasto de Manos Unidas: 43 millones de euros (del mismo bolsillo).
· Gasto de las Obras Misionales Pontificias (Domund): 21 millones de euros. ¿Imaginan de dónde sale?: del mismo bolsillo, el de los cristianos que viven en España.
· 365 Centros de reeducación para marginados sociales: ex-prostitutas, ex-presidiarios y ex-toxicómanos; 53.140 personas. (Ahorran al Estado medio millón de euros por centro).
· 937 orfanatos; 10.835 niños abandonados. (Ahorran al Estado 100.000 euros por orfanato)
· El 80 % del gasto de conservación y mantenimiento del Patrimonio histórico-artístico. (Se ha calculado un ahorro aproximado al Estado de entre 32.000 y 36.000 millones de euros/año).
Son cientos de millones de euros. A esto se debe añadir que la casi totalidad de las personas que trabajan o colaboran con las distintas organizaciones que dependen de la Iglesia, Manos Unidas, Cáritas, etc., son voluntarios que no perciben sueldo. ¿En cuánto se podría cuantificar su trabajo? Por esta razón el Estado sigue concediendo alguna ayuda, simbólica, a la Iglesia Católica. Le sale muy barato, y así se justifica.
Asombra que una mayoría de personas ignore o parezca ignorar toda esta labor humanitaria y el ahorro que supone, tan necesario para que la sociedad española pueda sobrevivir a esta crisis financiera, humana, cultural, ética, de valores, etc. La respuesta es que al Gobierno laico de España, sencillamente, no le interesa que se sepa. No ocurre lo mismo con el futbol y la televisión. ¿Imaginan si los medios de comunicación prestaran una mínima atención a esta ‘Noticia’ tan social?
Y hay otras preguntas: ¿cuántos comedores para indigentes ha abierto o va a abrir el sindicato CC.OO.? ¿Cuántos hospitales para enfermos terminales y de SIDA gestiona el sindicato UGT? ¿Adónde más puede acudir una familia necesitada para pedir un plato de sopa, a alguno de los centros de ayuda que los fascinantes partidos políticos españoles –incluyéndolos a todos- han abierto, o piensan abrir, próximamente?