Ana Abril Ámez

Después de tres meses de haber comenzado la pugna por el control de Vivo, la operadora española consigió el miércoles su objetivo y firmó un acuerdo con Portugal Telecom (PT) para signar la comprar del primer operador de telefonía móvil de Brasil.

La empresa que preside César Alierta presentó su oferta de 5.700 millones de euros el 11 de mayo por la compañía a su socio PT. Después de una gran escaramuza y ulteriores ofertas -la última fue de 7.150 millones de euros-Telefónica consiguió su propósito, pero tuvo que elevar su oferta a 350 millones de euros para que el primer ministro luso, José Sócrates, justificara la retirada de su veto a la operación iniciada por ambas compañías hace meses. Por ello, después de muchos sudores fue aprobada por los consejos de administración de ambas empresas.

Tras el golden share impuesto por José Sócrates, el presidente ejecutivo de la compañía PT, Zeinel Bava, reconoció la mejora que retomó la oferta gracias a esta imposición.A pesar del alto precio pagado, Cesar Alierta confesó sentirse muy satisfecho, porque la compra de Vivo por Telefónica posicionará a la compañía española en el líder de las telecomunicaciones de Brasil, el mercado más llamativo para el sector en Latinoamérica, con 69,2 millones de clientes.

"Estamos muy satisfechos de haber alcanzado este acuerdo con Portugal Telecom que beneficia a los accionistas de ambas compañías. Se trata de una oportunidad única de creación de valor. Vivo es el líder del mercado de telefonía móvil de Brasil, país por el que Telefónica mantiene una apuesta decidida de futuro" afirmó el miércoles Cesar Alierta.

Presente en Brasil desde 1999, Telefónica se consolidará como el primer operador integrado de Brasil, y PT mantendrá su presencia en ese mercado al tomar definitivamente una participación del 22,38% en el segundo grupo de telecomunicaciones, Oi.