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de la fundación madrina

Casa de acogida para familias víctimas, junto al programa de realojamiento en familias y pueblos “familia salva familia”

Madrid, 13 de noviembre de 2024.- A medida que el fango se hace polvo, las víctimas de la Dana en Valencia transitan de las necesidades más urgentes a la búsqueda de la normalidad. El acceso a las ayudas estatales, la recuperación del mobiliario, el tratamiento de las heridas o el acompañamiento psicológico han pasado a ser las carencias más apremiantes de quienes lo han perdido todo.

Con la intención de ofrecer soporte permanente e integral a estas personas, la Fundación Madrina ha activado “la línea MadrinaSOS con el número 900 670 353”, en la cual los afectados por la riada pueden comunicar sus necesidades materiales, sanitarias y psicológicas. Esta información servirá para focalizar la asistencia a las víctimas, optimizar el envío de material y coordinar las labores de los voluntarios en el epicentro de la tragedia en la Comunidad Valenciana.

MadrinaSOS nace de la alianza con Fundación Konecta y Konecta, que han proporcionado un equipo de profesionales especializados, voluntarios de la empresa, la tecnología necesaria y todos los recursos para hacer efectiva esta atención telefónica y proporcionar el apoyo y asistencia a las víctimas, beneficiando a numerosas familias en la región.

Las teleoperadoras Madrina estarán activas las 24 horas del día, los siete días a la semana. Karina Polanco, encargada del call center, define esta propuesta como una “primera fase”, en la que “las víctimas, los voluntarios y los donantes podrán ser redirigidas al departamento más idóneo con la ayuda más personalizada, según sus necesidades”.

Un techo para quienes lo han perdido

Igualmente, la Fundación Madrina está habilitando una residencia en el municipio de Almenara, en la provincia de Castellón, para que una docena de familias monoparentales, cuya casa haya sido abnegada por la riada, puedan contar con un lugar seguro para reconstruir sus vidas, en tanto que encuentran un lugar definitivo para asentarse.

La propiedad, cedida por la Congregación Hermanas Angélicas, tiene doce habitaciones con baño privado, dos cocinas, un patio, comedor comunitario, varios salones, una terraza, capilla y está equipada con todo lo necesario para una estancia cómoda y segura. Una vez los voluntarios de la Fundación Madrina culminen en una primera fase las labores más urgentes de rescate y ayuda a la supervivencia de las víctimas en Valencia, comenzarán a entrar las familias. Se espera que esto ocurra a partir de diciembre.

“Esta residencia de Almenara acogerá a familias monoparentales con menores a cargo y a embarazadas víctimas de la Dana que se han quedado sin hogar”, ha detallado Conrado Giménez Agrela, presidente de la Fundación Madrina.

El municipio de Almenara está excluido de la lista de municipios con alto riesgo de inundación, según el Plan de Acción Territorial sobre Prevención del Riesgo de Inundación en la Comunitat Valenciana (Patricova), por lo que representa un lugar seguro para las familias. Además, el pueblo entero junto a sus representantes legales en el ayuntamiento, desean apoyar este proyecto acogiendo con entusiasmo a los voluntarios que diariamente duermen en el hogar.

La Fundación Madrina aboga por un realojo de los afectados por la Dana en lugares exentos de riesgo por inundación, con el fin de prevenir que se repita la catástrofe. Cientos de miles de valencianos viven en zonas inundables, según el Patricova, y cerca del 30% de las casas destruidas por la Dana estaban ubicadas en territorio inundable.

Familias que salvan familias

Asimismo, la Fundación Madrina anuncia la creación del programa “Familia salva familia”, a través del cual hogares y pueblos de diferentes Comunidades Autónomas podrán acoger a las familias afectadas de Valencia con menores a cargo, mientras encuentran una solución habitacional, y será a través del Programa Pueblos Madrina que la entidad viene desarrollando desde hace 10 años, y en el que ha realojado a más de 300 familias y cerca de 1.000 niños.

En este sentido, la organización solicita a las familias acogedoras que deseen abrir sus puertas para los damnificados por las inundaciones, ponerse en contacto también a través de “la línea MadrinaSOS con el número 900 670 353”.

Para ejecutar este programa integral de reconstrucción de Valencia, la Fundación Madrina anima a la sociedad civil a que se sume al grupo de voluntarios, ya sea en Valencia o en otras ciudades de España. La entidad necesita personal sanitario y especialistas en atención psicológica en situación de emergencia para ampliar el equipo actual y poder llegar a más afectados.

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