
Victor Alvarado
Estamos ante uno de los grandes estrenos del año, que tiene un gran problema porque, si El Señor de los Anillos es una trilogía literaria por la carestía de papel tras La Segunda Guerra Mundial, convertida en trilogía cinematográfica, El Hobbit: Un viaje inesperado (2012) está basado en un libro de 280 páginas del que se van a sacar tres partes, por lo que nos preguntamos: ¿No será estirar demasiado el chicle para sacarnos la pasta? La respuesta es afirmativa y Peter Jackson ha tirado de apuntes y bocetos de J R Tolkien con el objetivo de completar la historia.
La película encierra una serie de valores necesarios para cambiar este mundo como la solidaridad, lealtad, compañerismo, la amistad y el amor a los demás. No obstante, el realizador ha intentado resaltar la importancia del perdón y su capacidad sanadora. La frase que Gandalf le decía a Bilbo lo dice todo que viene decir que el valor se demuestra no cuando se mata a un enemigo, sino cuando se le perdona la vida