Redacción. La agencia estadounidense de calificación de riesgo Moody’s acaba de retirar la máxima nota para la deuda soberana de Francia de AAA (triple A) y le ha otorgado la AA1 con perspectiva negativa, como ya hizo Standard a& Poor’s a principios de año.
Moody's ha basado su decisión en que Francia posee unas "perspectivas económicas a largo plazo afectadas de forma negativa por múltiples desafíos estructurales", entre los que se incluyen "una pérdida de competitividad gradual pero continua" de la economía francesa, y la rigidez y falta de flexibilidad "en los mercados laboral, de bienes y de servicios". Su rigidez estructural, unida a la contracción de la demanda, generan una incierta perspectiva económica que las agencias han valorado en negativo.
Por otra parte, Moody’s pone de relieve que la exposición del país galo a las “turbulencias” de la eurozona es muy grande, y su resistencia débil, por lo que “ha aumentado la posibilidad de que Francia termine ayudando a otros países para superar sus respectivas crisis”.