Solicitan el despliegue de la UIP y las UPR en Valencia y el Ministerio del Interior y la DGP lo niegan
Ante la negativa del Ministerio del Interior y la Dirección General de la Policía, el sindicato JUPOL ha iniciado una campaña de voluntarios para desplazarse a las localidades afectadas y ponerse a disposición de los responsables para colaborar en los dispositivos
El sindicato JUPOL recuerda que tanto las UIP como las UPR tienen reconocidas entre sus funciones la “actuación y auxilio en caso de graves calamidades o catástrofes públicas”
JUPOL se pregunta cuál es la diferencia entre otras catástrofes de años anteriores en España y la que acontece estos días en Valencia y en Castilla La Mancha para que anteriormente si se hiciera y en esta ocasión, se niegue el despliegue de estas unidades
Valencia, 31 de octubre de 2024/ El sindicato JUPOL, mayoritario en la Policía Nacional, ha puesto de manifiesto su indignación ante la negativa por parte del Ministerio del Interior y la Dirección General de la Policía, a nivel nacional, y de la Jefatura Superior de Policía de Valencia, a nivel local, de proceder al despliegue de todos los efectivos disponibles para colaborar en las tareas de ayuda a los ciudadanos tras las terribles inundaciones ocasionadas por la DANA en la Comunidad Valenciana y en Castilla La Mancha.
Desde esta organización sindical, se ha tenido conocimiento de la voluntad expresada por los agentes de las Unidades de Intervención Policial (UIP) y de las Unidades de Prevención y Reacción (UPR) de participar de manera activa en las tareas necesarias ante la grave catástrofe surgida tras el paso de la DANA.
Unas funciones que según ha explicado el portavoz de JUPOL, Ibón Domínguez, ambas unidades tienen reconocido dentro de sus atribuciones. En concreto, las UIP en el Real Decreto 1668/1989, de 29 de diciembre y las UPR en la resolución de la Dirección General de Policía de 6 de noviembre de 2013, en las que literalmente figura que estas unidades tienen atribuida la función de “Reacción e intervención ante cualquier situación que requiera una actuación inmediata (...) En auxilio o defensa de los ciudadanos ante calamidades o catástrofes públicas”.
Ante estos hechos, no entendemos la negativa del Ministerio del Interior y de la Dirección General de la Policía de poner en marcha a estas unidades, que cuentan con medios suficientes y preparados para intervenir en este tipo de situaciones.
Desde la organización sindical, esperan que esta negativa “no se deba al inicio de los trabajos para la derogación de la Ley de Seguridad Ciudadana y estén intentando evitar la imagen de los miembros de las UIP (antidisturbios) ayudando a la gente y así dejar solo las imágenes de estas unidades cuando tienen que intervenir contra manifestaciones violentas”.
JUPOL se pregunta cuál es la diferencia entre otras catástrofes de años anteriores en España y la que acontece estos días en Valencia y en Castilla La Mancha, para que anteriormente si se hiciera y en esta ocasión, se niegue el despliegue de estas unidades. Desde el sindicato recuerdan por ejemplo la participación de las UIP y las UPR en sucesos como el 11-M en Madrid, el accidente en el metro de Valencia en 2006, el terremoto de Lorca en 2011, el accidente de Spanair en Madrid en 2008, el accidente ferroviario de Santiago de Compostela en 2013 o la catástrofe del Prestige en Galicia en el año 2002.
Voluntarios
Por su parte, desde Valencia y ante la negativa de la Jefatura Superior, a través de la Comisaría Provincial, de enviar a todo el personal disponible (en servicio o libre y voluntario) de Valencia a colaborar con los compañeros de las localidades afectadas por la terrible DANA, el sindicato JUPOL en esta provincia ha tomado la decisión de organizar grupos de voluntarios para desplazarse a estas localidades y ponerse a disposición de los responsables para lo que sea necesario.
Desde JUPOL Valencia aseguran que “Si algo tiene nuestra profesión es la enorme vocación que procesamos de servicio público, vocación que en estos casos aumenta exponencialmente”, y añaden que “son muchas las labores que podemos ofrecer, batidas, protección para evitar saqueos, colaborar en la asistencia a personas con movilidad reducida, y un sinfín de funciones que ayudarían a acelerar los trabajos en los primeros días posteriores a la catástrofe o incluso facilitar el descanso de aquellos compañeros que llevan trabajando sin apenas descanso desde la fatídica tarde-noche del pasado día 29”.