Principal

Diario YA


 

el problema no es que a los Obispos no les guste la ley del aborto

Ley del aborto: “A Dios seguro que no”

Rafael Lopez-Dieguez Gamoneda. Secretario General de AES (El partido social cristiano). Hace unos días el portavoz del PP afirmó que a los Obispos no les iba a gustar la ley del aborto , pero que esto no sería un inconveniente para su aprobación. La lógica conclusión a sus palabras es que la tan esperada  ley del aborto del PP, la de los que se paseaban por las manifestaciones próvida luciendo palmito y dándose golpes de pecho contra la brutalidad de ZP, va a ser más de lo mismo, va a ser una ley de supuestos , quizás más restrictivos con mayores exigencias administrativas y técnicas, pero al fin y al cabo admitiendo el aborto en determinados casos y con ello convirtiéndose en una ley nuevamente abortista, una ley por lo tanto inicua y execrable porque ampara el más cobarde y abominable de los crímenes, el del mas inocente, el del ser más indefenso el del concebido y no nacido.

 Lo malo es que aquí no van a quedar las cosas, todo esto lo van a edulcorar con la Ley de la maternidad, que por delante vaya  dicho  será muy bien recibida, pero en este caso van a usar esta ley, que siempre debió existir, como una forma de mitigar su cobardía y tibieza, como una forma nuevamente de producir escándalo y de justificar que con ella se paliaran el número de abortos, Dios lo quiera, pero con las dos leyes en concurso pretenderán como siempre el equilibrio sobre cable para dar satisfacción a los abortista y a los contra abortistas del sistema.

 Es un escándalo intentar enmascarar lo ilícito del aborto con la ley de la maternidad, esta ley solo es compatible con un radical no al aborto, qué sentido tiene hablar de promoción de la maternidad, mientras que de otra parte  se cercena con la ley del aborto. Cuantas veces he oído  a los responsables de las organizaciones próvidas oficiales y a los miembros del PP más caracterizados por su postura próvida afirmar que esta es la única solución en estos momentos, penalizar en todos los supuestos el aborto y dejar sin contenido este “criminal derecho” no es políticamente posible. Este es el discurso oficial, el discurso tibio al que nos tienen acostumbrados tanto el PP como determinadas organizaciones próvida.

 El PP ha incumplido su programa electoral en materia económica por razones al parecer de fuerza mayor, lo ha incumplido políticamente al mantener la elección de los miembros del Consejo del Poder Judicial, Supremo, Fiscalía y Constitucional por los partidos políticos, también lo ha incumplido al acatar la sentencia constitucional en materia de matrimonios homosexuales y las consecuencias sobre la adopción de menores, y parece que lo va incumplir también en materia social y moral con la regulación del aborto bajo una ley de supuestos. Este incumplimiento recurrente de su programa debería pasar factura en las próximas elecciones y debería hacerse plantear a sus votantes  una recusación publica de su política, pero veremos como cuando llegue la hora, los que hoy critican e incluso exigen un cambio inmediato  empezaran a apelar al voto útil, al miedo al grito “que vienen los socialistas” y dejando de un lado lo importante, lo sustancial, dejaran de ser coherentes y votaran a los tibios, a los que les engañaron, dando la espalda a su conciencia.

 Sr. Alfonso, Sr. Rajoy, el problema no es que a los Obispos  no les guste la ley del aborto, el problema es que no le va a gustar a Dios,  y lo cierto es que, aunque sea duro y pocos se hayan atrevido a decirlo, si mantienen el derecho al aborto en cualquier supuesto,  van a legislar de espaldas a EL, porque en esta ocasión no se pueden amparar en la tediosa teoría del mal menor ya que ustedes con su mayoría absoluta pueden hacer el bien superior, ustedes deben invertir la dirección de esta sociedad y ponerla rumbo hacia la cultura de la vida dando la espalda a la de la muerte,  ustedes son la mitad de congruentes que el perverso PSOE que confundidos arremeten con sus falsas y perversas doctrinas transformando la sociedad sin complejos, ustedes no tienen la gallardía y valentía para hacer lo mismo -obviamente en sentido contrario- y no debe ser su preocupación ni disculpa la estabilidad legislativa, no se tapen en el burladero de las resoluciones constitucionales, la ley a favor de la vida bebe de las fuentes del derecho , el derecho natural y de la moral objetiva, esa que rige para todos, sin distinción de Credo e ideología, esa que afirma que no mataras, no robaras…, ,  es por ello que no les debe preocupar si mañana pierden el gobierno el que venga otro y  vuelva a cambiar ley, pero en el ínterin ustedes habrán cumplido con su obligación y esos niños salvados durante su mandato de las trituradoras abortistas vendrán a ser sus mejores valedores para conseguir los votos necesarios para obtener un escaño en el lugar más importante, el de listas abiertas ( a cada uno se nos juzgara por nuestras acciones y omisiones), el que no se ha de revalidar por toda la eternidad, el más preciado,  junto a Dios.