
Lo que el siglo XIX llamó cuestión social y el siglo XX convirtió en bandera de lucha por la justicia, para luego arriarlo a media asta con los Estados del Bienestar, ha derivado, en este siglo XXI, en cuestión antropológica. La alferecía inicial de aquella bandera social fue la izquierda; después, pasó a otras manos su protagonismo (fascismos, autocracias, keynesismo, New Deal…); finalmente, quedó en una vitrina de museo, guardada por un neocapitalismo de rostro humano. La cuestión es que la izquierda se quedó sin bandera que enarbolar y, además, sus escasas energías cedieron ante la implosión del socialismo real.
Miguel Mssanet Bosch. Que estamos entrando en una etapa de la historia de nuestro país en la que parece que admitir los efectos de una propaganda demagógica, de quienes están interesados en darle un vuelco total a nuestra débil democracia, se ha convertido en algo incontrovertible debido a la pasividad, la abulia, la desgana o la complicidad de una parte muy importante del pueblo español, resulta ser algo evidente, innegable y, desgraciadamente, con todos los visos de conducirnos hacia un olvido total de los principios, valores y tradiciones que durante siglos fueron el acervo y patrimonio de quienes creían en la justicia, la seguridad jurídica, las libertades ( no confundir con lo que actualmente se confunde con ellas), y el orden como elementos irrenunciables en todo modelo de Estado democrático.
La Pandemia que no cesa y afecta a todo el mundo ha supuesto un reto social nunca visto desde la segunda Guerra Mundial por sus daños en todas las facetas de la vida humana no sólo en la política y la ciencia, sino también en todo la relacionado con el sentido de la vida del mal, el dolor, enfermedad, la muerte y el más allá, cuestiones para las que solo la ciencia no tiene respuesta completa. Son muchos los profesionales y personalidades que intentan dar una solución global a esta cruda realidad. Una de estas personalidades más se comprometida es el Papa Francisco, no solo como máxima autoridad eclesiástica, sino por su innegable e in- discutible liderazgo mundial.
El 8 de septiembre celebramos el Nacimiento de la Virgen María o Natividad de María, una fiesta de origen en la Iglesia de Oriente, que se celebra el 8 de septiembre, nueve meses después de la dedicada a la Inmaculada Concepción de la Virgen que se celebra el 8 de diciembre.

Fidel García Martinez. Es la palabra moda que se impone de forma innecesaria y abusiva. En el léxico español clásico existen infinidad de términos referidos a la campo semántico de espíritu de superación de las adversidades, que explican mejor, lo que dicen que significa la resiliencia término enfático con el que el presidente del Gobierno ha querido impactar a los empresarios y ganarse su confianza ante los tiempos que están afectando duramente a la sociedad española en general: moral social y económicamente.
Manuel Parra Celaya. Lo que el siglo XIX llamó cuestión social y el siglo XX convirtió en bandera de lucha por la justicia, para luego arriarlo a media asta con los Estados del Bienestar, ha derivado, en este siglo XXI, en cuestión antropológica. La alferecía inicial de aquella bandera social fue la izquierda; después, pasó a otras manos su protagonismo (fascismos, autocracias, keynesismo, New Deal…); finalmente, quedó en una vitrina de museo, guardada por un neocapitalismo de rostro humano. La cuestión es que la izquierda se quedó sin bandera que enarbolar y, además, sus escasas energías cedieron ante la implosión del socialismo real.
Luis Losada Pescador. Banco de España y BCE insistiendo en la necesidad de afrontar fusiones y, voilá, ya tenemos las conversaciones reconocidas entre Caixabank y Bankia. ‘CaixaBankia’ se convertiría en el mayor banco de España con 650.000 millones de activos y enormes sinergias -duplicidades- que permitirían ahorros de costes. Como en todas las fusiones, se trata de una fusión por absorción. Es decir, una come y otro es comido. Por tamaño de activos, número de oficinas y empleados, come Caixabank y Bankia es comida. Que ‘Goiri’ quedara como presidente no ejecutivo no significa nada. Sería la concesión a la sede en Barcelona y a la dirección práctica de la burguesía catalana.
Miguel Massanet Bosch. Hay quien dice que la pandemia del Covid 19 le ha servido al Gobierno de cortina de humo para ocultar muchas de sus carencias y para permitirle ir retrasando, con pretexto de darle prioridad a la lucha en contra de la epidemia, alguna de sus promesas que, evidentemente, tanto por su cuantía como por la dificultad organizativa y la magnitud de la reacción de los presuntos beneficiarios de la medida, les hubiera sido imposible implantar en un entorno de normalidad.
Se está tratando la forma de que las aulas vuelvan a abrirse con el menor peligro posible para el colectivo docente, pero el riesgo sin duda existe, o al menos así lo entienden muchos miles de padres que se revelan contra la medida de iniciar el curso de forma presencial dadas las actuales circunstancias
Los tiempos lúgubres e inciertos que se están viviendo por la pandemia de la Covid-19 que amenaza a todo el mundo, han motivado que la cuestión del origen del mal se plantee realmente de forma continua pero sin la profundidad necesaria