José Javier Solabre Heras. La equiparación salarial entre hombres y mujeres pende de una diferencia
de nada menos de 53 días de trabajo, vamos que lejos de tener vacaciones, de no ser reconocida su labor social de trabajo en casa, de desarrollo de su labor maternal, de su labor de esposa, etc, tendría que trabajar 14 meses al año para alcanzar la remuneración del hombre. Trabajar 26 horas al día es una barrera insalvable, pero no lo es menos trabajar durante 14 meses al año, la mujer está condenada a trabajar si
ser reconocida, y el hombre no mueve un dedo sin que alguien se lo reconozca.

Las cosas nunca serán iguales, y unos hablan de 80 años de tiempo para
equiparar y otros, los más optimistas hablan de no menos de media docena
(y claro no se lo creen, ni ellos), la mujer siempre será tratada de
menos.

A mí me llama enormemente la atención, siempre que oigo como se pregunta a
una mujer, y además casada:  ¿trabajas?, parece que se piensa que una
mujer que en su casa es contable, gerente, jefe de personal, directora de
logística y mantenimiento, jefe de compras, gestor de almacén, etc., etc.,
pero claro como es en su casa no es trabajar,. vamos hombre.
¿Alguien va a reconocer algún día la labor del ama de casa, de la mujer en
la sociedad?.  Solamente se la castiga explotándola, y no hablemos de lo
que podría suponer la humillación a la que se la somete de manera
constante, solo por su condición de género. Hoy con la Ley de Violencia de
Género, podría dar pie a multitud de denuncias y denunciados, es sus casas
y no es así por no darse el supuesto de hecho de convivencia.

La vergüenza debería de embargar al hombre y la verdad es que si no le
podemos remedio YA, somos unos CARADURAS, por lo menos eso.