Cada vez son más las compañías que realizan una mala práctica o fraude en su Declaración, lo que conlleva a los conocidos casos de multas o sanciones por parte de la administración hacia dichas empresas.
Día a día se puede ver en los medios de comunicación o en nuestro entorno más próximo cómo la Agencia Tributaria investiga y da con diversas compañías que intentan defraudar a Hacienda no consiguiéndolo y recibiendo multas, sanciones o incluso penas de cárcel.

Las principales clases de infracciones tributarias y sanciones de Hacienda
Existen tres clases de infracciones: leves, graves y muy graves. Entre las más conocidas y usuales se encuentran:
-    El empleo de facturas, justificantes u otros documentos falsos, es uno de los motivos siempre y cuando esto represente más de un 10 por ciento en la base de sanción.
-    El ocultismo de datos dentro de nuestra declaración por ejemplo, si omitimos citar algunos ingresos que se hayan obtenido.
-    La inclusión de personas ajenas dentro de la declaración también es un hecho relevante. Por ejemplo cuando figura el nombre de un tercero en la titularidad de unos bienes.
También existen otros tipos de infracciones más corrientes y leves como:
-    Infracción tributaria por dejar de ingresar dentro del plazo establecido en la normativa de cada impuesto la totalidad o parte de la deuda tributaria.
-    Infracción tributaria por incumplir la obligación de presentar de forma completa y correcta declaraciones.
-    Infracción tributaria por obtener de forma indebida devoluciones.
Por todo ello siempre será bueno contar con una asesoría fiscal que ayude a nuestra empresa a tener las cuentas claras y de una forma correcta respecto a lo que la Agencia Tributaria exige y evita sanciones o multas innecesarias por una mala gestión de los documentos.